El edificio objeto de la intervención es la histórica sede del Instituto Nacional de Industria desde 1945, que a pesar de su unitaria imagen exterior, no es fruto de una operación planificada, sino de una sucesión de ampliaciones que, partiendo de un primer palacete, termina por ocupar toda su manzana. Tras albergar ya en entre los años 2000 a 2005 la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, queda en desuso. El reto es pues adecuarlo a los requisitos de una sede administrativa contemporánea manteniendo a la vez su personalidad y carácter histórico.
